La Calle te Come, Hermano: El Tesoro de Don Paisa

Amigo, la calle no perdona. Hoy, les vamos a contar algo verídico y muy doloroso que nos cruzamos en las recorridas (las de llevar algo de comida caliente o algo de ropa a la gente que está en situación de calle).

Conocimos a “Don paisa”, un gaucho Santiagueño, de los de antes, de esos con un corazón grande como una casa. En las distintas corridas nos sentábamos a charlar un rato con el viejo, le compartíamos un sándwich, un guiso hecho a las apuradas. El tipo siempre andaba con un perro que era un guardián; nadie se le acercaba al compañero.

Pero ayer, nos enteramos de la bronca más grande: lo mataron.

¿Quién fue? Los mismos pibes de la calle.

Lo hicieron porque Don paisa siempre andaba con una bolsa y él decía que ese era su único tesoro. Lo mataron para ver qué tenía en esa bolsa.

¿Y sabés qué encontraron cuando lo reventaron? Cero guita, cero valor. Solo había fotos de su familia, de sus hijos, de sus nietos.

No llegamos a saber por qué el Paisa llegó a situación de calle, ni por qué sus hijos y nietos no estaban ahí con él. Pero se lo llevaron puesto.

Esta es una más de las historias que pasan en este país.

Mientras esto sucede, y mientras los que rancheamos juntos a la noche cuando el frío asola no tenemos mantas para ponernos o que comer, arriba, el fantasma, que se dice presidente, anda haciendo payasadas en el Movistar Arena. Honestamente, eso no da ni risa, ni dolor, ni espanto, sino que te hace sentir muy mal como ciudadano.

La gran duda que nos queda, al ver esto, es: ¿qué nos pasa como sociedad?. ¿Qué nos pasa que nos matamos entre nosotros? ¿Qué nos pasa como personas?

Estos tipos (los que están en el poder) no tienen ni uno que sea decente, ni uno. Y mientras, se llevan la vida de gente como “Don paisa”. Por eso, la necesidad de sacarlo (al fantasma y su gente) es cada vez mayor.

Oscar Apa y la banda.